Era común que salieran en pareja. En
horario de clases era diferente, Andrés aun pasaba tiempo con sus amigos, por
las tardes iba a las practicas y bromeaba con ellos. Gina con las chicas de su
clase hablaba mucho, era casi imposible que se queden sin charlar en clases.
Los trabajos en grupo, cada uno los hacían con sus amigos, cuando estaban
separados no solían comentar sobre su relación o nombrarlo al otro.
Lo que intercambiaban con regularidad eran
miradas y sonrisas como si fueran brisas en el campo. La sonrisa de Andrés hacia
ella era especial, podía iluminar el cuarto entero, era un sonreír nuca antes
visto. La sonrisa de Gina era admirada, sus amigas la complementaban con
regularidad.
Los momentos que si salían juntos eran
todos los almuerzos, todo el tiempo libre que tenían en la tarde la pasaban
juntos. No era nada raro verlos juntos por la calle paseando. Él la acompañaba
a su casa para asegurarse que ella llegue segura, además de extender unos
minutos más de estar juntos. Ella ingreso al club de cocina solamente para tener
el mismo horario con los entrenamientos del club de fútbol. Además que aprendía este mundo totalmente nuevo para ella, que era la pastelería.
En una salida de viernes cuando él la
acompañaba, le propuso salir a pasear por las tiendas. Ella acepto enseguida,
además que era lo que más quería hacer en ese momento.
El empezó diciendo:
-Tenemos el mundo por delante,
además del fin de semana, vamos por las tiendas. Empezamos por el centro y después
nos vamos a las que están al borde de la playa, cuando el sol quiera ocultarse.
-Es la mejor idea, hoy quisiera
pasear por la playa. Además de buscar
algunas conchas para mi cuarto.- Gina se arregla su sombrero cloché rojo-Hoy día tengo un proyecto que quería
para nosotros; así que empecemos con el primer paso del “proyecto salida en la
tarde”. Para eso primero necesito que me prestes tu mochila un momento.
-Aquí la tienes.
Andres coge la mochila sujetándose
de ella con fuerza por las correas diciendo:
-Ya. ahora no te la devolveré
hasta que te encuentres en tu casa.
-Oye..
-No pienso hacerte cagar tu
mochila mientras te llevo en esta cita, además es lo minino que puedo hacer a
cambio de que me acompañes.
-Entonces es una cita- Gina le
indica con un tono agudo para molestarlo
-Por su puesto que si mi bella
dama.
-Ummm.-sonriendo un poco- y cual
es el segundo paso en el super proyecto de la salida por la tarde, no querías
ir a comer algo para empezar, ¡Se que ya tienes hambre!
-NO, no, no. Sobreviviré por el
momento, además que no hay que saltarse pasos, ese es el paso numero 4, mas
bien vamos a las tiendas. Empezando paso uno la dulce tomada de manos. Señorita me
permite.
Andrés le ofrece su mano, Gina lo
toma y cruza sus dedos.
Me encanta que el paisaje de ambos sea cerca del mar y le de un toque tan real, cotidiano y pacífico.
ResponderEliminarMe encanta que el paisaje de ambos sea cerca del mar y le de un toque tan real, cotidiano y pacífico.
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