Es una cita P.3

     

     Si elegí un mal momento para abrir el blog fue este en mi vida. Ya estoy al final de una época emocionalmente desgastante para mi y mantener el blog como deseo se me sera mas fácil. En mi casa se derrumbo mi patio y tuve que hacerme cargo de la reconstrucción siendo que odio la construcción sin decir el presupuesto.

Ahora tengo preparado mas entradas emocionantes, temas mas Geeks ,que es mi verdadera naturaleza además de empezar de agregar el enfoque psicológico; al cual recien entendí como incorporarlo de forma interesante. 
    Me faltaba decir que mi mejor amigo de la vida esta preparando las ilustraciones de la novela ligera para que sea verdadera.

Ahora con ustedes esta penultima parte de esta cita que disfrute de distintas maneras en mi mente. Espero disfruten:

     Volviendo al día de la salida, por la tarde ellos terminaron en una cafetería. Andrés degusto cada mordisco de los pasteles de la cafetería pensando que eran el perfecto preludio para seguir con la tarde. Para seguir con el plan debían caminar hasta a playa, donde estaba la feria, esto mientras el sol se ocultaba lentamente. En el camino hablaron de planes para pasarla juntos en vacaciones, de cómo las clases cada vez se ponían mas difíciles y de muchas cosas mas. A continuación entraron a la feria callejera de artesanías que se armaba por esa época al lado del mar.

-Salir de aquí seria imposible hasta que encontremos dos objetos específicos que sean de tu agrado- Dijo Andrés acercándose a las tiendas sin perder tiempo.

-Alguna pista mas, así te puedo ayudar en tu digna búsqueda.- Respondió ella

-Por supuesto, solo tienes que tener tus ojos bien abiertos por algo que los dos podremos llevar y que te guste. De hecho los dos objetos que buscamos tienen que ser idénticos, si no parecidos.- Indico él con un dedo levantado como si estuviera explicando algo  sumamente importante.

-Eso no debe ser difícil de encontrar; como que ya quiero 5 cosas. Porque no empezamos con unos tatuajes temporales de unos cerditos y después por unos gorros, algunos collares, aretes, varios pañuelos y cientos de adornos marítimos.

- Se nota que la señorita desea varias cosas; será fácil encontrar algo para ti. Los tatuajes…umm, creo que paso aun no estoy listo.

-Entonces vamos por unos pósteres, una nueva billetera, por allí ¡Que linda mochila de zorrito!, hasta tienen una colita, la quiero. Una nueva playera tampoco estaría mal, me están faltando pulsera y también quisiera un despertador.

-Ya entendí el punto; aunque eso no responde a que será nuestro objeto para los dos, vamos primero a la tienda de pósteres.

     La tarde les pertenecía y disfrutaban de cada momento juntos, nada los detenía a estar juntos. La pareja en la tienda de postres se detuvo para apreciarlos mientras Gina comentaba:

-Me parece bien bonito el que tienen el chico agarrando como un diario y su gato gordo que lo sigue, se que es de un dibujo conocido. Y el de allá de un zorro blanco con un escudo en su espalda y llamas en su cola, creo que es de un juego ¿no?

-Esa es la diosa  Amaterasu según se, es de los dioses que mas cuida de nosotros los humanos. Me parece de lo más increíble y que sea en forma de lobo. Y si es de un videojuego, de hecho aparece en varios juegos.

Aun agarrados de las manos se dirigieron a la siguiente tienda. Gina se quedo unos instantes detenida frente a la tienda absorbiendo cada detalle de las manillas, ella en algún momento de su vida quiso hacer las suyas, mas no sabía como manejar el metal para hacer los dijes personalizados que son lo esencial de las pulseras.

-Que bonita la de allá de un sol y esa de lobo hablando de Amaterasu.

-Están bonitas y que tal esta de árbol de la vida.

-Esta bien aunque preferiría  esta de una luna con su estrella. -Gina toma el dije con una luna en cuatro creciente y la estrella que en realidad era un cristal que imitaba el tintinar de las estrellas.

-Esta la llevaremos por favor.-Andrés pasa al vendedor el collar de luna.

-Si vas a comprar una me gustaría más esta de un elefante blanco.

-Me parece excelente elección a mi también me gusta mas.- Pasándole al vendedor la otra pulsera.

Los dos después pasaron por la tienda de mochilas donde la mas bonita evidentemente era la de un zorrito naranja tipo peluche con cabeza y colita incluida.  La tienda no era muy grande y tampoco tenia gran número de mochilas, las que se encontraban en exposición todas eran hechas a mano y de diseño exclusivo.

-Esa mochila blanca de panda con sus ojos pintados y orejas salidas es adorable con su cartera de cabeza de panda que hace juego esta adorable.

-Ciertamente mí querida Gina.

-Aunque la mejor es la de Totoro indudablemente ese color plomo es relajante.

-A mi también me gusta, aunque me quedo con la de la esquina de galleta, quien se imaginaria una mochila redonda que sea de galleta inclusive la tienen en versión chica con su moño en la cabeza  y el distinguido señor galleta con su monóculo y su bigote.  

-Todos son muy bonitas.

-¡Quieres llevarte todas!, ¿no? Se ven tus ojos de avaricia. Ya te veo en medio de la tienda encima de una montaña de mochilas peluches, con una sonrisa malévola y ojos rojos de demonio diciendo: Son todos mías. Wuajajajajajajajajaj

-Tal cual, es justo lo que va a pasar dentro de 5 segundos si no vamos a las otras tiendas.

-Que te parece ese puesto de esencia e incienso.

-No, prefiero ir a esa tienda de anillos que me esta llamando.- Indico ella, guiando Andres de la mano atraída por los objetos como si fueran imanes

-Acepto,  tal  vez ahí encontremos lo que buscamos. Justo estoy viendo lo que podría ser lo indicado.

-¿Dónde, donde, donde? Dime, dime, dime, dime

-Entre los llaveros. Primero están los llaveros impresos y detrás de esos están los de metal colgados. Me refiero al  tercero que para nuestra suerte vienen en pares, es el de la figura de dos estrellas que se encuentran y con sus puntas forman una tercera estrella. Me parece perfecto.

-Si, me encanta.

-Desde hoy ese será nuestro símbolo lo tendré en algún lugar donde lo pueda ver todos los días, siempre lo tendré cerca.

-Yo lo pondré en mi mochila favorita.